Entre ayer por la noche y esta mañana el precio del petróleo ha bajado en picado. Casi un 25%. Esto, por el hecho de que Arabia Saudí ha decidido utilizar la estrategia del “o conmigo, o contra mí” con Rusia.
Por culpa de esto el precio del petróleo ha bajado hasta los 30 dólares por barril, llegando a estar más de un 33% a la baja en algún momento de la mañana. No había bajado tanto desde el 16 de enero del 1991, hace más de 29 años, y rodeados en la guerra del golf.
“El recorte que hicieron entonces no contemplaba una situación de pandemia global”
Todo empezó antes de navidad, en diciembre, cuando los dos países eran buenos aliados, y a pesar de que tenían alguna desavenencia, acordaron recortar la producción de petróleo. Esto lo hicieron porque preveían que durante el 2020 la demanda bajaría.
Cómo hemos visto acertaron totalmente, pero el recorte que hicieron entonces no contemplaba una situación de pandemia global a causa de un virus ( el COVID-19) que se haría famoso un mes más tarde.
Viendo el panorama actual de pánico, del que hablaremos si está justificado más adelante, Arabia Saudí lideró una reunión de la OPEP la semana pasada para acordar más recortes a la producción destinadas a contener la bajada del precio.
Estos acuerdos tenían una condición: que Rusia también participara reduciendo su producción. Esta condición ya anunció Rusia que no era posible, cosa que hizo que bajara el precio del petróleo de una forma contundente durante los últimos días de la semana pasada.
“Arabia Saudí extrae petróleo a un coste de entre los 10 y 15 dólares por barril, Rusia lo hace con un coste del alrededor de 30 dólares por barril.”
Pero la cosa no se acaba aquí, puesto que Arabia Saudí, viendo que Rusia no quería ayudar con los recortes de producción, ha decidido declarar la guerra (de precios) a Moscú. Los árabes han decidido aumentar la producción para hacer bajar los precios del petróleo.
Esto, que también les perjudica a ellos, no les perjudica tanto como a los Rusos por el hecho que les es menos costoso extraer el petróleo a los países árabes. Las cifras son estimaciones, pero mientras Arabia Saudí extrae petróleo a un coste de entre los 10 y 15 dólares por barril, Rusia lo hace con un coste del alrededor de 30 dólares por barril.
Con el anuncio del aumento de producción el petróleo está oscilando entre los 30 y 32 dólares por barril, cosa que sitúa la producción de petróleo en Rusia muy cerca de pérdidas mientras que los árabes todavía se pueden frotar las manos con beneficios reducidos, pero beneficios al fin y al cabo.
La estrategia de Arabia Saudí previsiblemente es forzar que Rusia acabe para aceptar el acuerdo que le propusieron la semana pasada para no soportar suela los recortes de producción.
“Corea del Sur tiene la tasa de mortalidad más baja por infección de COVID-19, situándose en el 0,6%”
Cambiando de tema, pero no tanto, para frenar el Coronavirus Corea del Sur ha tomado una decisión al mismo tiempo drástica y brillante. Ha decidido hacer muchos tests aleatorios para que todo el mundo que tenga el virus sea diagnosticado. Esto ha provocado que se detectaran muchos más casos de COVID-19 que hasta ahora no se detectaban porque las personas afectadas no estaban lo suficiente enfermas cómo para ir al médico.
Hasta Lunes por la mañana ya han realizado más de 196.000 pruebas, y han encontrado más de 7.300 infectados. Este aumento de diagnósticos también ha provocado que bajara la tasa de mortalidad, y Corea del Sur tiene la tasa de mortalidad más baja por infección de COVID-19, situándose en el 0,6%, mucho más baja que la que la OMS está registrando y que es de un 3,4% (publicado martes de la semana pasada).
“Muchos de los valores que han bajado más durante estos últimos dos meses son muy atractivos para comprar.”
Esto confirma la teoría de que mucha gente que tiene el virus no entra en los registros porque se piensan que es un simple resfriado y no van al médico, o los síntomas no son bastante graves para hacer que vayan.
También se va confirmando la teoría de que los mercados están sobre-reaccionando a todo ello, y que muchos de los valores que han bajado más durante estos últimos dos meses son muy atractivos para comprar. Aun así, el COVID-19 es una amenaza real y lo más peligroso es que de momento no tiene cura.
Por este motivo se pone a la gente en cuarentena.
Por este motivo la OMS lo está siguiendo con detalle.
Y por este motivo se tendría que hacer todo el posible para parar su expansión.
